Perfecto Martínez ( Foto externa )
POR HIPÓLITO VEGA /
SANTIAGO, R D.– Durante la Asamblea General Ordinaria de la Seccional Santiago del Colegio Dominicano de Periodistas (CDP), el presidente del Club Recreativo de los Periodistas, Perfecto Martínez, denunció con firmeza una campaña sistemática de difamación que, desde hace cuatro años, ha estado dirigida a desacreditar a directivos del CDP, ex secretarios generales y líderes de organizaciones aliadas.
En su alocución ante los miembros presentes en la asamblea, Martínez calificó esta ofensiva como “una embestida calculada” para destruir la institucionalidad del CDP y afectar moralmente a quienes lo dirigen. Explicó que los ataques no solo se han limitado a publicaciones en redes sociales y grupos de WhatsApp, sino que han escalado hasta entregas físicas de documentos difamatorios a universidades, empresarios e instituciones de la ciudad de Santiago.
“Estamos frente a una campaña que busca tergiversar los hechos y presentar a dirigentes honestos como si fueran delincuentes, sin tener en cuenta los informes financieros que mes tras mes, año tras año, se presentan con total transparencia”, puntualizó Martínez.
El presidente del Club Recreativo señaló que quienes orquestan esta campaña no se han interesado en acudir a los mecanismos institucionales para canalizar sus inquietudes, prefiriendo, en cambio, socavar la credibilidad del CDP mediante injurias y falsedades.
Ante esta situación, la Asamblea General aprobó por unanimidad una resolución que autoriza a la directiva de la Seccional Santiago a someter al Tribunal Disciplinario del CDP a los responsables de estas acciones, las cuales violan flagrantemente la Ley 10-91, el Código de Ética del Periodista y el reglamento interno del colegio.
Asimismo, se aprobó una segunda resolución que condena enérgicamente a los responsables de fomentar el odio dentro del gremio y de intentar manchar la imagen de reconocidos dirigentes del CDP y del Club Recreativo.
Con este paso, el CDP Santiago y sus órganos adscritos reafirman su compromiso con la ética, la unidad gremial y la defensa del buen nombre de sus dirigentes frente a campañas difamatorias carentes de fundamentos.
